Clasificación: Nacionales
Sección: Principal
El Ballet de Camagüey retoma Cantata, del coreógrafo cubano Iván Tenorio, con la intención de refrescar una de las piezas emblemáticas del conjunto, para conmemorar el Día Internacional de la Danza, el venidero 29 de abril.
De acuerdo con la directora de la compañía, Regina Balaguer, los coros profesionales de Ciego de Ávila y Camagüey, junto a la Orquesta Sinfónica de esta provincia, acompañarán a los bailarines en la escena del Teatro Principal los dos días de funciones: 29 y 30.
Cada 29 de abril se conmemora en todo el mundo el Día Internacional de la Danza, declarado por la Unesco en 1982, para ponderar el natalicio del maestro y creador del ballet moderno: Jean-Georges Noverre (1727-1810).
En reciente conferencia de prensa, Balaguer recordó que en 2022 se cumplen 40 años de que la Unesco realizara la declaratoria en torno a este arte. También comentó que Cantata en principio se llamó Juegos profanos, la compañía camagüeyana la bailó por primera vez en abril de 1971 y, en su momento, fue una obra muy polémica.
A juicio de la maître, la pieza no ha envejecido con una profunda reflexión sobre el desarrollo de la vida, el ser humano desde el nacimiento, sus distintas relaciones, la influencia del conocimiento, las carencias, miserias, defectos. La coreografía exige un gran esfuerzo a los bailarines, al compás de la desgarradora partitura ideada por Carl Orff para musicalizar 24 poemas escritos por goliardos entre los siglos XI y XIII, que no se descubrieron en Alemania hasta el XIX.
El coreógrafo Iván Tenorio, fallecido en 2014, fue autor de obras trascendentales para el Ballet Nacional de Cuba como Rítmicas y La casa de Bernarda Alba. A este creador se le considera el dramaturgo del ballet cubano por haber empleado piezas magistrales de la literatura o leyendas históricas como punto de partida para sus composiciones dazarias, entre ellas, Leda y el cisne, Hamlet, Fedra, Los amantes de Verona, Viva Lorca, Teseo y el Minotauro.
Algunas de sus piezas, integraron el repertorio de varias compañías internacionales como el Ballet Nacional Eslovaco; el Ballet del Rhin, en Francia; el Ballet de Cali, en Colombia; el Ballet del Sodre, de Uruguay, el Ballet de Santiago de Chile y el Joven Ballet de Cámara de Madrid, España.
Con Rítmicas, Tenorio ganó el segundo premio en coreografía moderna en el Concurso de Ballet de Tokio, Japón, de 1976 y el Nina Verchinina a la Mejor Coreografía Moderna en el primer Concurso Latinoamericano de Ballet y Coreografía de Río de Janeiro, Brasil, en 1983.
Por la significativa carrera, el Consejo de Estado de Cuba le otorgó, en 2003, la Medalla Alejo Carpentier y el Ministerio de Cultura le concedió, en 2007, el Premio Nacional de Danza.
Por Martha Sánchez